Perderlo todo
Perder es ganar un oasis de calma pura
es vencer las ganas de ganar porque sí
la vieja trampa de las cartas marcadas
el anillo de bodas falso de diamantes
los besos que se dan sin ruido en el alma
Perderlo todo es una oportunidad divina
de entender que no todo está perdido
para encontrar nuevamente el camino
e iluminarlo de luces vivas de emoción
Perder es anticiparse al miedo de perder
conectar con la huella del cálido abrazo
de lo que se ha dejado en la despedida
escribir el diario de lo que un día fue
y permitir que el viento impulse el ayer
Perderlo todo es escavar en nuestro ser
agujerear el corazón para dejarlo llorar
rendirse para descansar la paciencia
buscar una nueva forma de ganar y perder
