(A María Kodama)
#1976 #EscritoresArgentinos #LaMonedaDeHierro
Temí que el porvenir (que ya decli… sería un profundo corredor de espe… indistintos, ociosos y menguantes, una repetición de vanidades, y en la penumbra que precede al su…
Torne en mi voz la métrica del per… a recordar que el tiempo es la div… trama de sueños ávidos que somos y que el secreto Soñador dispersa. Torne a afirmar que el fuego es la…
Del otro lado de la puerta un homb… deja caer su corrupción. En vano elevará esta noche una plegaria a su curioso dios, que es tres, do… y se dirá que es inmortal. Ahora
¿Usted vio la última campaña presidencial? ¡Qué vergüenza! Con Carter recorriendo el país con un avión que se llama 'El Maní Volador’. ¿No es una vergüeza? Bueno, pues ha sido votado: e...
La larga postración lo ha acostumb… a anticipar la muerte. Le daría miedo salir al clamoroso día y andar entre los hombres. Derriba… Enrique Heine piensa en aquel río…
La obra visible que ha dejado este novelista es de fácil y breve enumeración. Son, por lo tanto, imperdonables las omisiones y adiciones perpetradas por madame Henri Bachelier en un cat...
Ante la cal de una pared que nada nos veda imaginar como infinita un hombre se ha sentado y premedit… trazar con rigurosa pincelada en la blanca pared el mundo entero…
No rendirán de Marte las murallas a este, que salmos del Señor inspi… desde otra luz (desde otro siglo)… los ojos, que miraron las batallas… La mano está en los hierros de la…
Está bien que se mida con la dura sombra que una columna en el estío arroja o con el agua de aquel río en que Heráclito vio nuestra locur… El tiempo, ya que al tiempo y al d…
Cumplida la agonía, ya solo, ya solo y desgarrado y rechazado, se hundió en el sueño. Cuando despertó, lo aguardaban los hábitos cotidianos y los lugares; se dijo que no debía pensar de...
¿Dónde estará mi vida, la que pudo haber sido y no fue, la venturosa o la de triste horror, esa otra co… que pudo ser la espada o el escudo y que no fue? ¿Dónde estará el per…
Crecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz. La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única. ¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras, la...
¿De qué agreste balada de la verde… de qué lámina persa, de qué región… de las noches y días que nuestro a… vino la cierva blanca que soñé est… Duraría un segundo. La vi cruzar…
En un día del hombre están los día… del tiempo, desde aquel inconcebib… día inicial del tiempo, en que un… Dios prefijó los días y agonías hasta aquel otro en que el ubicuo…
Magnus Barfod, en el año 1102, em… Que en tus ejércitos militen el or… Que mafiana, en los campos de mi r… Que tus manos de rey tejan terribl… Que sean alimento del cisne rojo l…