#EscritoresColombianos
Antes de devorarle su entraña pens… Antes de ofenderlo de gesto y pala… Antes de derribarlo Valorad al loco Su indiscutible propensión a la po…
Son un dios en mi pueblo y mi vall… No porque me adoren Sino porque y… Porque me inclino ante quien me re… unas granadillas o una sonrisa de… O porque voy donde sus habitantes…
He recorrido hospitales mitigando… Una locura que durante muchos años ayudó a mi imaginación en mi poesí… pero que después se volvió amenaza… y puso en peligro mi vida
He robado parte de tu cuerpo y de… Le he tendido una celada a los rec… que aquí te recuerdo ¿Recuerdas am… El cielo de la noche casi azul se… entre tus pestañas Noche vibrátil
Fuiste un testigo indolente Ni comprendiste Ni ayudaste a la víctima. Fuiste un cómplice de la perfidia… Tácitamente aceptaste
En el cielo profundo de mis mastur… ocupas ese ámbito de deseo irrefre… Inagotable y tierno que te devora… aunque tú no lo sepas Tu cuerpo… Y es tan mío como no pudo serlo al…
Cuando te conocí venía de estar mu… Muerto y amortajado en mis propios… Venía de esconderme en una grave l… que tomaba mi vida y se la ofrecía… para que él la llevara a un lugar…
Gallo de ónix y oros y marfiles ru… quédate en tu ramaje con tus putas… Hazte el perdido El Robado Hazte… Anoche le oí a mi padre llegó tu h… Mañana afílame la tijera para moti…
Yo tengo para ti mi buen amigo un corazón de mango del Sinú oloroso genuino amable y tierno
Tengo en la cabeza Un pájaro celeste Que anida en esta prisión. Tengo en este pájaro Un ardiente corazón.
Ah desdichados padres Cuánto desengaño trajo a su noble… el hijo menor el más inteligente En vez de abogado respetable
Ya para qué seguir siendo árbol Si el verano de dos años Me arrancó las hojas y las flores Ya para qué seguir siendo árbol Si el viento no canta en mi follaj…
Del hongo stropharia y su herida m… derivó mi alma una locura alucinad… de entregarle a mis palabras de si… todo el sentido decisivo de la ple… Decir mi soledad y sus motivos sin…
Caigo de mí hacia mí ¿Dolor? no ¿Angustia? no ¿Qué pues?
A esa abuela ensoñada venida de Constantinopla A esa mujer malvada que me esquilmaba el pan A ese monstruo mitológico