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Cuantas cosas que se dicen, de los Derechos del Niño. cuanta hipocresía verbal, desfachatez, falsedad, palabras que se envilecen,
Si de la palabra hice una amiga y compañera inseparable elegiría el silencio... Cuando el amor a mi lado se detien… cuando los sueños felices me conmu…
Por culpa de esa cuestión de no desertar en vida, la razón de las razones, navega a veces perdida. Y es muy triste comprobar,
Dentro de 200 años mis poemas serán reconocidos, la tierra y la luna serán primos, el domingo con el lunes se hablar… Dentro de 200 años
Con azul pintaba, los azules tiempos, la niña querida. Y quizás por ello, los otros colores,
Nadie puede sojuzgarte, ni mandarte, puedes irte cuando quieras. Eres soporte en la lucha en la crueldad, el desengaño,
Un tablón, dos caballetes, sentado y rogando al cielo, entre ansiedad y consuelo espera ese vendedor. Alguien se acerca y pregunta
Aunque camine rápido o despacio, será antes o después, lo sé y aunque sea un momento indefinido… y los pasos serán pocos o excesivo… será igual, también lo sé
Como puedo dedicarle, palabras al… Si de él dependen mis humores las penas que le causa a mis temor… las molestias que ocasiona, al ins… Como puedo hablar de él, de mi
Las sombras están cansadas se las trate malamente, las tildan de ser dolientes, de hacerle sombra a los años, de ser la sombra entre hermanos,
Como muñecas Mamushkas mi vida tiene otras vidas, segun dicen concebidas en vidas de otros pasados, por lo tanto de lo malo
Al colgar Dios una guirnalda de colores, dicen, comenzó la creación. Sacó la belleza de un armario, a la fealdad con ternura la abrazó…
Cuando no existan poetas, se habrán dado los últimos suspiro… y Dios por terminada la creación. Cuando no existan mas poetas, la nada, descartará las emociones,
Eran los comienzos de la década de los 70 y en la calle Florida, frente a la cartelera del antiguo edifico del diario La Nación, una cantidad de transeúntes, algunos habitué, discutían ...
No lleva una Cruz quien invoca al sufrimiento, ni el que engaña, con mentiras reiteradas. No enseña Dios