#EscritoresCubanos
Intocada, esculpida por la mano de artífice inmortal, de tus carnes turgentes se despren… hálito primaveral. Impoluta mujer de mis pesares,
Hiende el berilo una gaviota con reverberación de plata, y sobre el mar vibra la nota de un foque gris que se desata. La ventolera ruda azota,
Átomo de la Primavera, trajeas su manto de eternal encanto y glauca cimera. Esperanza con temblor de bandera,
Como yo la esperé, también mi choz… con su alma sin vida la esperó; y la ausente –esperanza vagabunda– para hacerme poeta retornó. A la puerta insegura de mi choza
Tuvo el Emperador romano alguna aberración senil consoladora sueños como cambiantes de la luna, ansias como celajes de la aurora. Tuvo el Emperador nefasto y grave
Entre el siena húmedo con olor agrario de las boñigas, son amapolas inquietas las crestas de las gallinas, chispas del iris las moscas,
Mis rimas tenebrosas, cual brunas mariposas nacidas de las viejas, las ignorad… son lampos imprecisos de nítidas c… que tienen de lo extinto romántica…
La piedra monda, letra del cosmos_ el reventón de piedra muerta_ es ovario y papiro en su escuetez. Planta, hombre y demos, Nos manifiesta los criptogramas
A la puerta _estilo kolosal_ de la estación X. Y. P. de Democity, y hora Standard las 14 y 5 con sol en Géminis.
Y mañana, como un asno de noria, el retorno canalla y sombrío, doblar la cabeza y escribir: Al juzgado, con los ojos aún llenos de lumbres…
En perspectiva hacia la callejuela… entre frondas, astas y columnas_ como el iris enorme de un ojo irri… Y al linde partida por el carbón d… gótica _la pupila de oro viejo
Cielo azul, verdes manglares, calvas colinas; y el río que al pasar junto al bohío aquieta sus alamares. Garzas de leves andares,
Muestra la arena su ropaje gualda; la armazón del manglar rumia y obs… la rada es una cinta que se enerva en azules y en lívidos se balda. El cielo es luz que por lo recia e…
Como una anciana de postizos grise… con la mañana se despierta la brum… y con la lentitud de sus años, en… de la Naturaleza, va borrando mont… horizontes y cielos. De repente
Con las sedantes horas de la tarde que arropan en matices las distanc… la luz mueve sus débiles prestanci… ante la pira que en ocaso arde. Vibra en la claridad póstumo alard…