El amor que uno desea, y de todo aquello que me diste
Es difícil confluir en el ideal del amor que todos desean
se podría graficar en una tarde o quizás en una madrugada
se podría resumir en un café por la tarde
o una resaca acompañada
un compañero en tu cama
o una dama en soledad en plena primavera
se podría resumir en un translucir del sol
cayendo por la ventana
del taxi que te trae de retorno
hacia la familia
Se podría resumir en pensarlo a cada mañana
o sentir su piel aferrándose a la tuya
en medio de la nada
en medio del deseo de convertirse en tu todo
podría ser un beso compartiendo lagrimas taciturnas
o quizás una sonrisa eterna y risueña
podría ser las risas en complicidad
un guiño de jugueteo por lo prohibido
puede ser momentos o recuerdos
el amor no tiene porque ser eterno
el amor no tiene porque ser completamente verdadero
puede ser tan imperfecto como los anhelos humanos
puede ser el fluir de lo real en medio del caos
puede ser tan cuanto vas sintiendo
pero sobre todo
puede ser todo aquello que puede hacerte feliz
si en el deseo de amar a alguien se nos permite morir
que el morir sea de amor y no por un rechazo
puesto que sentirse vivo, ya es por si
un hermoso regalo
del amor y sus virtudes, que va calando
tras un sentimiento plenamente consumado
puesto que muchos decidieron aferrase al pasamano
pasando paradas de su destino esperado
del tren del amor que algunos abordamos
y que el camino resultante, es aquel que siempre buscamos en suspiros.
