La enseñanza, el verso del aula
La enseñanza, el verso del aula
El verso se dota desde la ética del profesor en sus enseñanzas,
La docencia debe ser una aspiración antes que nada,
Llevamos la carga histórica y la cultura que modela nuestra práctica,
Articulemos la ética a partir del dialogo y la moral que nos destaca,
Seamos autorreflexivos edifiquemos con responsabilidad el aula,
Consolidemos nuestros códigos con la templanza que nos rescata,
Veamos más allá de la ventana de la educación que nos constata.
Promulguemos la tolerancia entre los alumnos con nuestro actuar,
Retomemos con un verso en el pizarrón la equidad y la libertad en las aulas,
Ellas son el centro de las necesidades actuales que nos llaman,
Nos reclama aquel ámbito transformacional tan actual que rompe lo tradicional,
Más que rebeldía es el nuevo carácter profesional de los docentes pronunciada,
Con esos valores olvidados de cooperación y determinación que nos ataña,
La solidaridad que acompaña la participación para consolidar la enseñanza.
Desde nuestra labor docente resaltamos el compromiso integral de nuestra práctica,
Institucional como global donde la riqueza es el cambio que podemos lograr,
Con la promesa sincera y personal de nunca dejar de aprender ni de investigar,
De orientar más que convencional nuestros intereses hacia la comunidad,
Nuestra profesión debe ser puesta de manera servicial a los demás sin igual,
Reflejando la virtud de nuestra vocación reivindicando nuestra dignidad,
Al ser los artistas que modelan pintan y presentan los pilares de la sociedad.
Expresemos la honestidad en la conducta ante nuestros estudiantes y colegas,
Apliquemos los valores y normas de trato justo para la humanidad.
Repensemos la profesionalidad con el ámbito de innovación que poseemos,
Manejemos correctamente las clases que son tan valiosas en cada momento,
Logremos llevar al alumno el entendimiento hacia la realidad con nuestros gestos,
Con nuestra voz manifestando la genialidad de sus pensamientos expuestos,
En ello está que nuestro hacer sea ayudarles a crecer y a reconocernos,
Por ello planificar cada instante es fundamental para la visión que queremos enfatizar,
Simbolizando en la pedagogía cada expresión didáctica que buscamos aplicar,
Desde lo interdisciplinar el profesor logra modificar y resaltar su identidad.
Ahora es el instante debemos abrir las cartas a quien pretende enseñar,
Encontrando de nuevo la relación entre maestro, alumno y cátedra,
Invitando a repensar y reaprender cada valor dentro de la curiosidad del estudiante,
Aprender a confrontar cada problema y cada dilema que puedan presentarse,
Para tratar esa dificultad con la paciencia y dedicación que recae en nuestra labor,
Con cada herramienta que como profesores disponemos desde nuestra formación,
Es el legado que debemos consolidar a partir de aplicar nuestra ética profesional,
Más allá del ethos que proporciona el faro en la tormenta si nos llegamos a desviar,
Traigamos de nuevo las tenencias del profesor que aviven cada aspecto a vincular.
Seamos los líderes una vez más que requieren los estudiantes en estos tiempos inciertos,
Promovamos su creatividad a través de la innovación de nuestra planeación,
Que cada actividad sea un mundo nuevo con el cual explorar e interactuar,
Del cual aporte al camino de su formación permitiendo a sus preguntas esbozar,
Con ellas aprendamos a escuchar con empatía fortaleciendo el factor motivacional,
Con el afecto de orientar los talentos que iremos descubriendo con cada oportunidad,
Desarrollemos cada uno de ellos al futuro del mundo de manera monumental,
Diseñemos los espacios de clase transmitiendo voluntades en bidireccionalidad.
Con nuestra educación basada en ética permitamos que sus sueños sean un manuscrito de estrellas para la tierra,
Las chispas más genuinas de cada expresión al aprender con entusiasmo y sonrisas,
Llenas de ilusiones e inspiraciones cae en nosotros sembrar confianza y expectativa,
Todas estas letras distinguen el papel del profesor como maestro para la vida,
Que a partir de todo lo que aplica, indaga y reflexiona se interioriza,
¡Profesor! Que esa palabra llene de significado su esencia,
Permita que su práctica en el aula sea la prosa más sincera y amorosa de su enseñanza.
