Me hace falta Soltar tu cabello, Dibujarte el cuello Y saborear tus besos... Me hace falta
Yo no quiero conquistarte por azar… Mucho menos convertirte en amorío… Yo no quiero seducirte solo para s… Mucho menos exhibirte descaradamen… Yo no quiero imponerte mis hábitos…
El sexo es un diluvio carnal Que nos rompe y a la vez nos unifi… Es un épico y oscuro ritual Que corrompe, pero también purific… Es un éxodo sin rumbo final
Si el amor no se mide Por el tono del cabello Por el ancho de las caderas, Ni el tamaño de los senos... ¿Acaso puede medirse
Tierno rostro que descansa en el c… Y en manos ajenas contemplo sorpre… La conmoción me agobia, me siento… Cautivo de su mirada, como un próf… De su encanto huir quisiera, despr…
Ven y perdamos el tiempo mirándonos fijamente, apreciando nuestros cuerpos. Ven y perdamos el tiempo sin decir una palabra
Ciertos fines de semana le consultas al espejo cómo debes ataviarte. Al notar que tiene dudas te deshaces de tus prendas
Lágrimas de tinta se diluyen con c… Escribiendo rimas tontas al invoca… Ilusionado me tienes aguardando tu… Dibujando con mis manos tus utopía… Y los besos y caricias que nos neg…
Sigo contando las horas De lujuria y derroche Que pedí a tu anochecer. Sigo buscando las costas Que tus uñas, veloces
No sé tú, pero yo No dejo de oírte sonreír Cada vez que escucho una canción, Con mis lágrimas me limito a escri… Tu nombre por cada rincón...
Cae la noche, Y tu alma y la mía se funden En un culto sin reservas: Tus pupilas me rehúyen, Mientras las mías se acercan...
Óyeme... No tengas miedo, Hazlo despacio. Fecúndame... Con el perfume que irradia tu pelo…
¿Será posible saber si todavía me piensas y tu mirada se enciende emulando una estrella? ¿Será posible creer
Quiero poder provocarte y hacerte… Mientras te quito el vestido, Quiero poder dominarte y sentirte… Mientras te muerdo el oído... Quiero poder arrasarte y sentirte…
Dos corazones, confinados, en busc… Caen presos del silencio, sus lati… En un féretro encerradas, yacen mi… En cruel tormento se ahogan cada n… Dos corazones, vagabundos, corren…