De «Un (casi) poema (malo) al día»
—¿Qué libros me recomiendas leer? —Todos.
al innumerable grupo de enfermedad… hoy no felicitaremos porque no hab… ni tiempo suficiente si se le toma… por ejemplo, y perdonen lo aleator… podríamos felicitar al síndrome de…
seguir reglas pero si están
Desperté con la mitad de los ojos.…
En algún lugar sin nombre, sin mapa, estoy esperándome. El lugar es adentro de mí y cada vez se aleja más de donde e…
no me tiren tanta pregunta
Para que los libros estén en todos los lugares.
la alfabetización no clasifica par… ni el amor propio ni el respeto pr… pero sigan y descubran libremente… las ganancias de los ricos seguirá… y las pérdidas de los pobres que c…
No importa quiénes sean los comensales al otro lado del libro. La poesía no sabe dar de comer.
Ser poeta en esta época (en esta vida, en esta era) no tiene mérito alguno (cualquiera podría, a muchos les t… ni don ni gracia
Soy un animal defectuoso: escribo y leo, pienso y actúo. Pero tengo un problema mayor: el animal preferido de dios es el…
Oigo a los pájaros cantar, dejo de escribir el poema…
Vino la luz a buscarme y se fue sin despedirse. Se equivocó de espejo, tal vez, o no la pude
—¡Mira, una estrella fugaz! —¿Qué pasa con las estrellas fugac… —Que se debe pedir un deseo. —Ah… —¡Pídelo!
Resulto ser la bala. Irrumpo en la batalla, busco el corazón de la guerra. De camino, mato lo que soy, siembro nuevos miedos.