De «Un (casi) poema (malo) al día»
Una bestia de siete cabezas me habita y, como es natural, cada cabeza tiene su propia dieta. La que más vigilo
Desperté por mayoría de votos. Y…
señor pasajero, si su avión no se… se lo debe a santa bona de pisa aunque en los aeropuertos no se ha… y los que aterrizan regresen al at…
La luz sirve para que no nos asuste la oscuridad que somos.
Desperté, pero el mundo sigue dorm…
el respeto al complejo ajeno
Aguas negras de color rojo que nad… Hacinamiento ulterior a la muerte. Igualdad de partes en partes desig… Restos remojados en espera de la l… Pictogramas de la colombianidad mo…
Escribo poesía a toda hora y mis manos ni lo saben.
lamento destruir sus castillos en… pero yo soy el hombre más rápido d… me lo imaginé ya a usted apuntándo… cuando todavía usted ni el disparo… y lamento destruir mis castillos e…
vivo de las palabras no
Si dijera que esto es un poema, lo… Pero si dijera que esto es un poem…
No importa el lado de la puerta que nos vea. El afuera siempre está adentro.
No importa quiénes sean los comensales al otro lado del libro. La poesía no sabe dar de comer.
tuvieron que inventarse el día de… después de quebrar a medio mundo c… en todo lo que no necesitaban ni el día de ayer ni hoy ni nunca un viernes que fue casi tan negro…
Todo verso nace porque sí. De sí.