Alma gemela
10 de mayo 2021
A Ernesto
Me pregunta si sigo igual de loca y triste, y respondo como si todo dejase de tener sentido de la noche a la mañana.
Respondo con malicia, saboreando la agridulce fantasía de su olor, de su sabor. Respondo con un más loca y menos triste que antes muy ardiente, con ganas de quemar los malos momentos que nos trajeron hasta acá.
Con ganas de apagar el fuego con mis labios húmedos y regocijados sobre su boca tibia.
Tibia como el amanecer de verano en los brazos de mi amante. Mi amado es complejo como crucigrama matutino, y mis labios gotean como el rocío de la mañana gris que me acompaña.
Hemos mudado tantas veces, que tu cuerpo se me hace desconocido.
Quiero probar de tus dedos, leer tus palmas para encontrarme en tu destino, quiero pasar mi lengua por el cielo de tu boca, que mi agua se convierta en vino.
Venirme como lluvia en tu arboleda, mojarte más que las lágrimas de primavera... Quiero beber de vos, e irme lejos, a sobrevivir la resaca y todo lo que me espera.
