#Españoles
Tu carne olía ricamente a otoño, a húmedas hojas muertas, a resinas… a cítricos aceites y a glicinas y a la etérea fragancia del madroñ… Hábil como una boca era tu coño.
Quisiera haber nacido de tu vientr… haber vivido alguna vez dentro de… desde que te conozco soy más huérf… ¡Oh! gruta tierna, rojo edén caluroso.
Y sin embargo, a veces, todavía, así de pronto, cuando te estoy vie… vuelvo a verte como antes, y me en… del mismo modo inútil que solía. Y me pongo a soñar en pleno día,
Una mancha de miel tiñe la luz Al tocar la ciudad Que aun dormida elabora Desde aquí arriba Se la ve desbordar
me pregunto por qué a veces esta piedra en la dentadura que no deja salir a gusto mis palabras cuando se disponen confiadas a brotar hacia ti a correr más frescas que las cascadas de a...
Dime mujer dónde escondes tu miste… mujer agua pesada volumen transpar… más secreta cuanto más te desnudas cuál es la fuerza de tu esplendor… tu deslumbrante armadura de bellez…
¿Qué sabes tú, qué sabes tú aparta… injustamente en tu cruel pureza; tú sin vicio, sin culpa, sin bajez… y sólo yo lascivo y sin coartada? Rompe ya esa inocencia enmascarada…
Tus ojos que no vi nunca en la vid… turbarse de deseo, ni saciados dormirse tras la entrega, ni extra… mientras gimes loca y sacudida; tu oreja, dulce concha adormecida
Mis besos lloverán sobre tu boca o… primero uno a uno como una hilera… anchas gotas dulces cuando empieza… que revientan como claveles de som… luego de pronto todos juntos
Algo debe morir cuando algo nace; debe ser sofocado, y su sustancia chupada para ser riego o lactancia en que otro ser su urgencia satisf… No habrá otra hora pues en que te…
En la noche por fin, sombrío oasis de los tórridos arenales del día, largamente, me he sumergido, y he disuelto la sal de la tristez…
El día, está tan bello que no puede mentir: comemos de su luz nuestro pan de v… Su cuerpo se desciñe
Porque te voy a ver tal vez mañana y porque aún palpita aunque dolido… por un instante pacto con mi histo… puedo al fin dar tu rostro a este… poner mi nombre a aquél que desang…
Está ya oscurecida la hermosura; los árboles desnudos se mecen en la sombra, y un gran silencio vela suspendido… En brazos de la noche
Di si eran éstas las palabras Míralas bien Córtalas con cuidado Y vamos a guardarlas Sepultadas debajo de la casa