Pensé que a lo mejor podía ser car… Enterrarme bajo tierra donde hace… Pensé que a lo mejor podría perder… Donde no podría hacerle daño a nad… Aplastado por el peso de palabras…

Desde una ranura opaca tiembla la fisonomía, se escudriña la carne, se retuercen las manos, se manchan las caras, las uñas fermentan, del desintegrado odio clínico se enciende la vasted...

El ácido que derritió esta fortaleza me atrajo a la obscuridad absoluta, al petróleo insondable, al agujero negro de la tristeza auto infligida Voraz sedujo mi corazón y se alimentó de ...

Y este poema no acaba, no, este poema no termina, porque seguir siendo escrito equivale seguir intentando, a seguir en la patética lucha que me he auto impuesto, a seguir rasgando mi ep...

La intermitencia y ambigua frontera de temperaturas opuestas desacelera mi ánimo escarlata, y donde he de encontrarme ágil y meditado vorágine, agudo instrumento atestiguante de ambival...

Si fuera así por ser, sería esenci…

En una oscura habitación de un paí… recuerda al primer intento, por un… tristezas, la encontró, derramada,… viejo y crepitante piso de madera,… aniquilación era una locura. Las v…

“En un cuadro de Rafael no es pos… boca. Quiero pintar cuadros donde… Fue con esas palabras que un hombr… Se aventuró entre sombras y oscuri… atentamente que nunca –con una ser…

Y me quedaré en un hipócrita silencio, guardando en mi estómago estas injurias, infectando poco a poco mi cuerpo, alimentando el virus de esta dualidad, inyectando en mis venas la duda....

Y por si fuera poco, escurrirme dentro de las notas más asiduas de tus libros queridos y atesorados, porque sí, todavía inmolado como una tipografía presta y pretonal es que provocas en...

Segadora de corazones, deja que mi aliento se enfríe en los hilos de tu piel Ven y corta con tus rotas uñas, una a una mis venas Quítame mi piel, lentamente, con tu venenosa lengua Que ...

¿Y si me presento como ausencia? Siempre carente, así bien herido. Como cicatriz que imprime apariencia humana, como capas y capas dérmicas que protegen y recubren grotescamente pero qu...

¿Qué era aquello que se podía saborear, no tanto con la retina, sino más bien con el aparato deductor, con el instinto de la espalda, como un cosquilleo vertebral más que un recrudecer ...

Bajo las lluvias que irrigan este… Dando paso a inviernos implacables… Indecibles, Inevitables En un charco de linfa

Los gritos de los no callados me guiarían a través de tu frío corazón, Y esta garrapata se aferrará a mi inocencia, así como este rencor se hace material. Y sabré que mi cometido se lo...