cueca
#Chilenos #Mujeres #SigloXX #Suicidio
Qué pena siente el alma cuando la suerte impía se opone a los deseos que anhela el corazón. Qué amargas son las horas
A mi casa llega un gato, pero es un gato decente, pero es un gato decente. Si yo le tomo la cola al tiro muestra los dientes.
Cuando habrá como casarse vivir en gracia de Dios si se han de estimar los dos los dos van a remediarse. Han de saber respetarse
En los jardines humanos que adornan toda la tierra pretendo de hacer un ramo de amor y condescendencia, pretendo de hacer un ramo
Adiós, corazón amante, ya me voy a padecer, dile al cielo que no muera ay, hasta que te vuelva a ver. Sólo una cosa te pido
Anoto en mi triste diario: «Restaurán El Tordo Azul». Allí conocí a un gandul de profesión ferroviario. Me jura por el rosario
Una paloma ingrata su amante deja, su amante deja, por seguir a otro amante que la aconseja,
Si lo que amo tiene dueño digo que me moriré, tan lejos venirte a ver mira si no te quedré. Póngame siete botellas,
Un bergantín velero los mares cruza con rapidez, no le temo al madero para postrarme niña a tus pies. No me hagas más sufrir
Qué palabra te dijera que llegue a tu corazón con la fuerza que al enfermo lleva la muerte su voz, reinando sobre lo humano
Una naranja me dieron, a mi dos me la quitaron, entre tres la arrebataron, cuatro por mí se opusieron, cinco la vida rindieron,
Ya llegó tu medio amante que medio andaba perdido. Medio te viene a buscar porque medio te ha querido. Medio arrepentido vengo.
Quisiera tener cien pesos pa´ buscarme un amorcito, porque de balde no hay caso que me quieran un poquito. Quién tuviera, señores,
Los amores del sacristán son dulces como la miel, amor que no se deseda no puedo, vida, vivir con él.
De mi vera te fuiste hasta Santiago, sí, hasta Santiago. De mi vera te fuiste hasta Santiago, sí,