María Zambrano

Muchas gracias

Muchas gracias;
muchas, muchas gracias.
Qué va. Está muy bien.
Dispénseme, señora.
No hay de qué.
Está completo, pero está muy bien.
Un farsante, un cuentista,
un enterao
—la Place de l’Alma—, un cualquiera,
me da igual.
Cuando usted quiera.
Ah, señora, ¡si usted supiese!
Está bien.
Aquellos buenos tiempos...
Mas París es París, y está muy bien.
Aunque no lo comprendo.
L’Étoile, Notre—Dame, Les Champs,
se sabe, ¿por qué no?
Encuentro, encontraré, ¿encontré
ya?
Entonces, apresúrese, vaya.
¿Por qué no?
¿Disfrutate esta lectura? ¡invítanos a un café!.
Tu ayuda nos permite existir.
Preferido o celebrado por...
Otras obras de María Zambrano...



Arriba