Al poeta Alfredo Jiménez (alias Alex)
Marzo /22/2015
Ese sonido de las pisadas sobre las hojas secas. Esconde una sensible melodía que encanta.
Nueva vida latía en su interior. Su juventud extrema, arropaba su vientre
Si perdonamos, liberamos el alma y nuestro ser. Pero sólo, si lo hacemos de verdad.
Guardó su amor en barco de papel, y se perdió.
Fresca y ligera te refugias del sol y del mal viento. Con tu belleza húmeda, esparces la pureza.
Cuando hablamos con el corazón, la voz acaricia el silencio...
La cigüeña se aferra a su alto nido y mira airosa. Son sus potentes alas amparo de su prole.
Dime hermana... ¿A dónde has ido? ¿Al cielo, a las nubes, a las estrellas?
Cuando sonríes, crece lo más sublime y...nacen rosas.
En el silencio, mi oído siempre alerta, siente al fin... ¡paz!
Te observo lleno de años y de hist… decorando el final de ese sendero, y tú, árbol milenario te alzas fie… donde amarillas flores ríen gloria… Te miro y oigo todas tus memorias
Para mí, “el paraíso” puede ser, simplemente, apoyar la cabeza
Noche de insomnio, gotas de agua que caen. ¡Quiero dormir!
El pajarillo, entona su tristeza. ¡Desde la jaula!
Ya sin aliento y al final del camino, ¡lluvia de abril!