A ella...
Julio 10 / 2013 Hermana; hoy se cumple un año de no tenerte. Ojalá estuvieses conmigo. Te extraño y te quiero.
El miedo late, golpea por doquier, escuece y arde. Irrita los sentidos, desvanece la vida.
¡Dios! me arrepiento, a ellos pido perdón, Tú, ¿me ayudaste? Fui tan frágil, tan débil sobre todo, tan sola.
Ese viejo árbol que yace junto al río no puede erguirse. La corriente lo inclina pero a su raíz, ¡no!
Las hojas secas se pierden junto al viento; ¡Adiós otoño! Y pleno de aire gélido llega el cálido invierno.
Abro mis ojos, miro el amanecer. Siento el aroma de la mañana y digo: ¡desperté!, soy feliz.
Te dije adiós un día, (ya no recue… Te veía elegante, altivo, vistiend… encantaba caminar de tu mano sinti… privilegio por tenerte. Pensaba, en mi pueril inocencia, q…
Cada mes de abril de tan esperados… regresarán mis anheladas golondrin… revoloteando como hacían antaño, y volando cual muy ligeras bailari… Son bellas y pintorescas, voy a bu…
Ya sin aliento y al final del camino, ¡lluvia de abril!
¡Pasan los días! Lentos, implacables con esa letanía que se convierte
Hay cosas malas que mucho desconciertan. Mas, lo peor, solo es inevitable cuando ya ha sucedido.
¿Noche de estrellas, luciérnagas y luna? ¡Todas me alumbran!
Tengo otra esencia, lejana juventud; ¡Como el vintage!
El trueno ruge. Y allá en la oscuridad, aúlla el lobo.
Es como lluvia que cayéndonos sobre la piel no moja. Es negra oscuridad rebozante de luz.
Entre las ramas, rosas blancas al viento. Luego, ¡el cielo!