Haiku 10
Marzo /17/2016
Amanda baila como las bellas aves que baten alas. Su ritmo es como viento incansable y tenaz.
Por favor, ven y rompe este silencio que me ensordece.
Así, se nos va la vida. Así, nos llega la muerte...
Ya sin aliento y al final del camino, ¡lluvia de abril!
¡Dios! me arrepiento, a ellos pido perdón, Tú, ¿me ayudaste? Fui tan frágil, tan débil sobre todo, tan sola.
Todo seguirá igual, como la vida al desplegar su curso, que imparab… solo guarde mi imagen conmovida o un recuerdo fugaz e imperturbabl… Cuando ya yo no esté, vendrá el ot…
Desde mi ventana todo parece igual, los árboles o aquella pared que una vez estuvo llena de musgo dando un verdor húmedo a mi jardín, pero no es cierto... Había un árbol grande que ya n...
¡Ella no sabía! que esa frustración la llevaría consigo tanto tiempo. Una inesperada y dolorosa
Fresca y ligera te refugias del sol y del mal viento. Con tu belleza húmeda, esparces la pureza.
¡Qué solitarias emergen las espigas de entre las ramas! Entre nubes, sus largos tallos al sol invocan.
Saliendo el sol, corrí veloz al campo. ¡Volvió a llover!
En el silencio, mi oído siempre alerta, siente al fin... ¡paz!
Abro mis ojos, miro el amanecer. Siento el aroma de la mañana y digo: ¡desperté!, soy feliz.
El dolor es inevitable, pero, ¿y el sufrimiento? ¿Debemos aprender a convivir con él?
—Dime q me quieres, que me extrañas. Dime que me necesitas... —Te quiero, te extraño,