Haiku 44
08/17/2018
#Haiku
¡En el silencio! siento el cálido arrullo de las palomas.
Cuando dormimos, vuela nuestra conciencia, si...¡no hay insomnio!
Corro sin cesar y el rugir del viento me golpea. Los sauces implacables y desafiantes,
Gran río azul de aguas verdes y frías. Corre tranquilo, aunque el peso de tu profundidad te agobie.
¡Qué solitarias emergen las espigas de entre las ramas! Entre nubes, sus largos tallos al sol invocan.
Nueva vida latía en su interior. Su juventud extrema, arropaba su vientre
Algún día padre, me darás tu mano. Y yo también,
Vuela aquella golondrina por los c… esperaba ansioso sus plegarias. La golondrina sin rendirse, vuela… El canto poco a poco se fue convir… Y el río... el río ya no podía llo…
Por favor, ven y rompe este silencio que me ensordece.
El silencio, es ese telón "intangible" que se l… ¿Será así de simple...?
Miro al espejo más, no me reconozco y sonreí. No era yo, es una imagen que sólo me contempla.
Gracias te doy por estar presente en el día a día. Tu amistad sincera es regocijo y aliento.
Abro mis ojos, miro el amanecer. Siento el aroma de la mañana y digo: ¡desperté!, soy feliz.
Te fuiste un día, y hoy, logro recordarte ¡al fin!...serena.
En mármol frío reposan estos versos. Dejad que el viento me lo cuente al entrar por la ventana.