#EscritoresEspañoles (¿A qué venía yo?)
Ni er clavé más primorozo, ni la roza más galana tienen tayo mas garbozo que tu carita zerrana
Se elige un tema, que brotó en la… al soplo de una historia conocida, como la sangre roja de una herida o como el agua clara de la fuente. Se infunde luego, con amor conscie…
La que quiera como yo, sepa que yo le deseo un novio de lo mejó: torpe o listo, guapo o feo, ¡pero sangre gorda no!
Grande pena es la de un ciego que no ve por donde va, pero mayor es la mía, que no sé tu voluntá.
Ha dicho un célebre autor que en cualquier juego de amór, ya dificil, ya sencillo, como entre a jugar un pillo... ¡el pillo es el ganador!
Guadalquivir El que se ensancha entre olivos y… Cruza pueblos de hechizo y de poes… Y al mar corre a rendirle sus cris…
Quisiera ser el aire que amoroso se mezcla en tus suspiros y en tu… quisiera ser la luz de tu aposento… de todas tus miradas codicioso. Quisiera ser el eco misterioso
De aquel amor guardo siempre, como reliquias sagradas una rosa y un recuerdo un suspiro y una lágrima. Misterios de mi ternura:
Dime, «¿por qué es ese llanto?» «Por una ilusión perdida, por una reciente herida, por un nuevo desencanto...» «Pues no llores más... y olvida»
Por tu cara rebonita te he comparao mi amó a la primera estreyita que sale ar ponerse er só Tienes unos dientes
Tengo en mi huerta una rosa primorosa, rosa de pitiminí; y oye chiquilla preciosa, una cosa,
No pases más por mi casa, que la gente es muy chismosa; yo no paso por la tuya, y estoy allí a todas horas.
Con sus nieves y aguas mil al invierno el sol destierra; suspira alegre la tierra y ese suspiro es abril. ¡Abril!, el primer albor
Esta noche mando yo, mañana que mande quien quiera: esta noche he de poner por las esquinas banderas.
Tengo unas calabazas puestas al humo; ar primero que pase se las emplumo.