#EscritoresEspañoles (La zancadilla)
Quiero y no quiero decir, y estoy sin decir diciendo quiero y no quiero querer, y estoy sin querer queriendo
Tengo unas calabazas puestas al humo; ar primero que pase se las emplumo.
Tengo en mi huerta una rosa primorosa, rosa de pitiminí; y oye chiquilla preciosa, una cosa,
Tierra de nuestro amor: ¡Dios te… Que en tu glorioso porvenir risueñ… nunca te falten ni voz amiga ni hilos de luz en que tejer un su… Que fecundes tus campos sin fatiga…
Ha dicho un célebre autor que en cualquier juego de amór, ya dificil, ya sencillo, como entre a jugar un pillo... ¡el pillo es el ganador!
La marisma se llena del sol de Mayo y recibe a la Virgen bajo su palio. Y el sol la besa
También después de una pelea hay un cuartito de hora bueno en que el cariño saborea la miel que sale del veneno.
Cuando nacen los besos en el alma, nacen para buscar a unos besos que buscan a esos otr… sin saber donde están. Y cuando no se encuentran y se fun…
He de pedir en la Audiencia para todo malhechor, que lo condenen a ausencia que no hay castigo mayor
¡Detente aquí, viajero! En estas… nace el que es y será rey de los r… entre pinos gigantes y bravíos, que arrullan su nacer y ásperas br… El reflejo otro tiempo las enseñas…
Esta noche mando yo, mañana que mande quien quiera: esta noche he de poner por las esquinas banderas.
No sé como no florecen las tejas de tu tejao, estando tú ebajo de eyas, primaverita de Mayo
Tersa, alegre, blanca y fina… en apariencia es igual la nieve a la sal marina. Dime tú, Nieves divina, si eres nieve o eres sal.
Dos vereítas iguales: ¡cuár de las dos cogeré! si cojo la de mi gusto mi perdisión ha de sé
¡Quién tuviera la zuerte… que tiene la luz que ze apaga y ze quea donde duermes tú!