Gravito en meditaciones vagas como suelen ser las mañanas Miro a lo lejos para ver si respir… el enigmático aroma de tu suspiro Buscando tus imágenes llanas

Por lo regular escribo mucho, en p… En cuadernos entregados a la obscu… Ambos casos en orden de no ser leí… En esos pongo mis secretos, alguno… Solo algunos los leo.

Un efímero aliento de instante per… Es un ocaso, es un ocaso. La luna se levanta con la eleganci… Qué grácil qué hermosa, preciosa m…

El tacto de tu perfume. Como flor de jacaranda, cayendo al suelo. La serenidad de tu voz. Tímida como un pino

Asco, triple asco perjuro a esos, a aquellos, a todos, a mi. Que soy parte de ellos y que en mi calidad de consciente de la putrefacción de mi propia carne, apenas soporto la hedionda y...

Es repentino y nada esperado. El encuentro con los ojos de quién… Los oídos que escucharan tu voz a… Pero como narciso del reflejo uno… o caer en la inmensidad de una maq…

Soñé que no soñaba y miraba el trigésimo sexto vellito de tu ceja derecha, respingar el obsesivo orden de la corona de tus ojos, quitando el orden divino de tu mirada, entregando la per...

Recuerdo... Recuerdo haberte dado mis brazos, mirarte a la pequeña cara como de girasol y ver la paz, la paz de tu descanso como de luna detrás de nube que sutil baña de luz tímida la n...

¿Donde más la belleza sino en lo s… En el parpadeo repentino después d… En la risa disimulada después de a… En el primer tacto de tu piel a la… Mientras duermes y te miro.

Por lo regular me siento joven per… Tu sonrisa pálida. tu cabello fres… ¿Qué gusto puedes tú tener por un… Ya todo es calma e impavidez en es… De la nada me brota una lágrima pe…

De entre las ramas salta un secreto en hojas llanas que son alimento Ya sea hambre o ganas