Loading...

Soneto

Muerto está el corazón: ¡ni aun el suspiro      
exhala del dolor! Mustio, cansado,      
enmudece el laúd, desesperado      
fastidio y soledad do quiera miro.      
 
  No son sueños poéticos, deliro:  
no suspira mi pecho enamorado      
¡quisiera descansar! sí, que abrumado      
me siento por el aire que respiro.      
 
  Ya no puedo cantar, ¡adiós, mi lira!      
tú que de mis ensueños y dolores
el eco fuiste, queda abandonada.      
 
  Si pronto el plazo de mi ser expira,      
tus vibraciones de pesar y amores      
repite en torno de mi tumba helada.
Liked or faved by...
Other works by Ángel María Dacarrete...



Top