Recogido por Esteban Peicovich en su libro "Borges, el palabrista"
#EscritoresArgentinos
En Londres, a principios del mes de junio de 1929, el anticuario Joseph Cartaphilus, de Esmirna, ofreció a la princesa de Lucinge los seis volúmenes en cuarto menor (1715-1720...
Una espada, una espada de hierro forjado en el… una espada con runas que nadie podrá desoír ni descifra… Una espada que los poetas
A los quinientos años de la Hégir… Persia miró desde sus alminares la invasión de las lanzas del desi… y Attar de Nishapur miró una rosa y le dijo con tácita palabra
Cuando nos anonada la desdicha, durante un segundo nos salvan las aventuras ínfimas de la atención o de la memoria: el sabor de una fruta, el sabor de…
Música del Japón. Avaramente de la clepsidra se desprenden gota… de lenta miel o de invisible oro que en el tiempo repiten una trama eterna y frágil, misteriosa y clar…
Lo sabían los tres. Ella era la compañera de Kafka. Kafka la había soñado. Lo sabían los tres. Él era el amigo de Kafka.
La imagen de aquel pueblo lapidado y execrado, inmortal en su agonía, en las negras vigilias lo atraía con una suerte de terror sagrado. Bebió como quien bebe un hondo vin…
The useless dawn finds me in a des… Nights are proud waves; darkblue t… Nights have a habit of mysterious… The surge, that night, left me the… and odd ends: some hated friends t…
En España, y aun aquí, en la Argentina, se puede conversar todavía. A mí me gusta conversar con los “chauffeurs”, con los mozos de café... En España yo he estado conversando con un past...
En un corredor vi una flecha que indicaba una dirección y pensé que aquel símbolo inofensivo había sido alguna vez una cosa de hierro, un proyectil inevitable y mortal, que entró en la ...
El porvenir es tan irrevocable como el rígido ayer. No hay una co… que no sea una letra silenciosa de la eterna escritura indescifrab… cuyo libro es el tiempo. Quien se…
Bajo la piedra yace el cuerpo de… Que fundó en estas islas el primer… De la estirpe de Odín Y sació el hambre de las águilas.
Un cúmulo de polvo se ha formado en el fondo del anaquel, detrás de la fila de libros. Mis ojos no lo ven. Es una telaraña para mi tacto. Es una parte ínfima de la trama que llamamos la...
Nadie lo vio desembarcar en la unánime noche, nadie vio la canoa de bambú sumiéndose en el fango sagrado, pero a los pocos días nadie ignoraba que el hombre taciturno venía del Sur y qu...
Sé que me acusan de soberbia, y tal vez de misantropía, y tal vez de locura. Tales acusaciones (que yo castigaré a su debido tiempo) son irrisorias. Es verdad que no salgo de mi casa, p...