#EscritoresNicaraguenses
Estás vivo en mi pecho y sólo yo te siento. Eres el alquimista que transforma en poesía nuestro llanto.
Hoy es noche de sombras de recuerdos-espada la soledad me tumba. Nadie que aguarde mi llegada con un beso
Otro círculo amor que hemos cumplido ¿será este el último en cerrarse?
Digo amor y lacera mi cuerpo el desamparo.
Soy una gaviota solitaria con el ala tronchada abro un surco en la arena.
Ya la ceiba no existe derrumbaron mi ceiba se hicieron añicos los espejos eché a secar mi Río y se escondió la luna.
No te pierdas, Teseo vuelve a mí. La playa está desierta tengo los pies sangrientos de correr en tu busca
Todos lo que amo están en ti y tú en todo lo que amo.
Dicen que la muerte es solitaria que nos morimos solos aunque estemos rodeados de aquello… pero tú me llamaste y yo no estuve:
Malogrados los ojos Oblicua la niña temerosa, deshechos los bucles. Los dientes, trizados. Cuerdas tensas subiéndome del cuel…
Desde tu ausencia llamo de tu exilio desde este viento sur que te convoca
Quiero entrar a la muerte con los ojos abiertos abiertos los oídos sin máscaras sin miedo
Fui la nube y la lluvia y el mar y quiero ser la tarde y la muralla
Solos de nuevo solos sin palabras sin gestos sin adornos
¿Qué fue de ese poema que no pude atrapar el que pasó rengueando frente a mí con las alitas rotas?