#EscritoresNicaraguenses
Fue una pequeña muerte tu partida. Una muerte pequeña que me crece cuando imagino a veces que estás cerca
No te pierdas, Teseo vuelve a mí. La playa está desierta tengo los pies sangrientos de correr en tu busca
Soñé que era un ala desperté con el tirón de mis raíces.
Quisiera creer que te veré otra vez que nuestro amor florecerá de nuevo quizá seas un átomo de luz
Quiero ser todo en el amor el amante la amada el vértigo la brisa
Sobrevivo. Alegrovosamente so bre vi
¿Qué fue de ese poema que no pude atrapar el que pasó rengueando frente a mí con las alitas rotas?
Nunca más esta lluvia ni esa mancha de luz en el peñasco ni el borde de esa nube
Dame tu mano amor, no dejes que me hunda en la tristeza. Ya mi cuerpo aprendió
Muero de a poco, amor no es la muerte sorpresa que deseaba la que libera y lanza
Porque aprendí a quererme puedo sangrar con tus heridas.
Ya la ceiba no existe derrumbaron mi ceiba se hicieron añicos los espejos eché a secar mi Río y se escondió la luna.
Otro círculo amor que hemos cumplido ¿será este el último en cerrarse?
Malogrados los ojos Oblicua la niña temerosa, deshechos los bucles. Los dientes, trizados. Cuerdas tensas subiéndome del cuel…
Todos lo que amo están en ti y tú en todo lo que amo.