POESÍA JAPONESA
Hay pecados que son una delicia tan exquisita que no hay confesiones ni sacerdotes que puedan perdonar. Una vela roja recorre mi pecho
Mariposas en mis ojos de solo imaginarte entrar por la puerta desnudarte con furia amarte, sentirte, morderte
Me siento bien así rompo un par de corazones cada día por el que me rompieron a mí. Voy paseando por medio de Graná tarareando una canción
Algo peor que la muerte es depende… Necesitamos una ley de la dependen… No hay nada más amargo que querer… No es de extrañar que el suicidio… Me pregunto si alguien escucha est…
Me siento expulsada del paraíso tirada en un enorme desierto donde no hay oasis odiando tus entrañas camino dejando mis huellas muertas…
Comienzo a perder el control caminando con mi corazón por este pasillo estrecho que cada día me hace sentir más at… Viene a mí, viene
Tejí el tiempo con hilos de mi piel, me hice un brigo de dolor ardiente, y sentí que la vida
Corre el riachuelo con esa libertad que da la vida. Cantaba el pájaro canciones de pasión,
Si solo lo viera en tus ojos aquel tiempo en el que besabas mis pestañas, en el que bendecías mis entrañas.
Si levitamos al mismo tiempo vida alcanzaremos el éxtasis sublime del ardor más demente
Estoy bordando Con hilos de las nubes. tu nombre amor. Dulce recuerdo envuelta en tules rosa,
Estoy cayendo tu mano ya no me sujeta, hoy tengo la tristeza besando mi boca, el cuervo me observa
yo sola pequé ¿por qué todo lo que deseo es pecado? Deseo aparecer siendo otra, pero sin dejar de ser yo las autopistas, la sequía, la religión, la distancia, la fiebre, la impotencia, ...
Cuándo me invitaron a la boda, sinceramente no me hizo mucha gracia, al fin y al cabo ya no eramos familia, hacía tiempo que me había divorciado, por otro lado si no iba pensarían que e...
Paseo Mujer del kimono de colores, con qué donaire llevas la sombrill… bajo las bellas shakuras rosas tú pelo resalta su negro azabache.