POESÍA JAPONESA
El colibrí liba muy dulcemente MI roja boca. Como si fuera fuente de licor dulce.
Quiéreme, pero quiéreme así, desnuda el alma como ramas en otoño. Ámame como si fuese primavera que brota.
En la sombra suspiraba la mujer, escudriño la noche, aguzó el oído todo permanecía sereno, más tranqu… la guerrera siguió andando, buscan… la oscuridad de la noche.
Esta noche deseo poseer tu cuerpo deleitarme en tu mirada besar tu boca ardiente como la pasión que te embarga.
Tu dulce cuerpo, enredado en mis manos, en blancas sábanas. Ojos zafiros son los que me iluminan,
Charla en la barra hombre medita, en mesacenter reloj atrasa
No me quise rendir calles de noche en Granada viento mortal que azota mi cara; pero seguí andando por ti, no, no, me quise rendir,
Puesta de sol entre ramajes rojos. Dorado lago. El cielo añil cubre el árbol de otoño.
El mundo ama las almas limpias y l… ¡Buenos días! ¿Un café o té? Que hoy sea un día lleno de colore… de esos que encienden de vida y ar…
Tiene la novia deliciosa sonrisa. Otoño cálido. Posee el sari estilo bengalí.
Tú me matas con esos labios veneno… con sabor a café fuerte, espeso y… eres nitroglicerina a punto de est… eres la adicción que no deseo deja… Eres el halcón que me cazó
Esta nostalgia que me mata, que me llena de llantos pasados. Me doy cuenta
Esa gitana bajo la luna llena está bailando Te quiero dijo ¡Ay! En aquel arroyo.
Ya no recibe un beso al despertar hace tiempo que no es feliz, lágrimas caen al suelo, veinte años casados, diez desde que él
Chica, aún no eres una mujer ¿qué haces en ese bar un viernes n… Estás fumando, sabes que está proh… el jefe del bar quiere tenerte. Chica aún no eres una mujer