Dori Gómez
Ya no recibe un beso al despertar, él se va sin decir adiós. Hace tiempo que no es feliz, lágrimas caen al suelo, veinte años casados, diez desde que él una mañana fría se fue al trabaj...
Trina el jilguero versos encadenados. ¡Maldita jaula, que lo tiene cautivo! Deja que cante
POESÍA JAPONESA CHÖKA En los hogares las luces encendidas olor a troncos
Daría todo, sí daría todo lo que t… mis vestidos, mi casa, daría media… dormiría desnuda en un banco por una simple respiración, el dolor me está comiendo
Mi vecino era un travesti, de maquillaje barato, y ropa repetida. Olía a perfume y axila. Raquítico como una escoba, de pelo largo y mal cuidado. El personaje de la cuadra, a quien todo...
El mar inmenso con los lindos corales, ¡Cuánta belleza! Miro alrededor mío cientos de peces
Te regalo mis manos, te doy mis ojos, te dono mi tiempo. Caen las hojas, otoño en nuestra piel,
Mis labios trémulos comulgan en tu boca carne y deseo el fuego de mi sangre cerezas de tu vértigo.
Las verdades a veces son rojas como la sangre de venas desordenad… pero ya he dejado de bailarte el a… que puede que te duela pero es que si te digo la verdad;
Espero tu llamada mil días sentada con veinte teléfonos esperando que suene alguno. Mis piernas dormidas
El pétalo albo atrae a la polilla, besa su néctar. En el sendero vagando el lobo blanco,
Hoy te quiero contar: que tu sonri… es la fuerza que me lleva a ilumin… mis días. Que la ternura me sale por la boca… como un poema, cuando oigo tu voz.
Solo se dedicaba a decir lo bellas que eran sus letras. Halagos a sí mismo se dirigía. Envidia insana de las personas, que realmente escribían.
En el oscuro callejón no llegaba ni la luminosidad de la luna, un ser pequeño estaba encima de una persona, comía con fruición, sonreía a la noche satisfecha. Susurros en el viento le l...
Nunca he sido de esas que deja que la conozcas tanto que puedas destrozarla, siempre he huido de intimidades mi ser es mío.