#EscritoresEspañoles Francisco Villaespesa
La sabia mano a cuyo tacto ardient… vibra la carne como un instrumento… prolongó la agonía del momento en una languidez intermitente... ¡Oh, el cálido contacto de tu fren…
Por no sé qué refinamiento oscuro que goza al prometer lo que nos ve… en ti, es el cuerpo lo único que q… perversamente inmarcesible y puro. Pones freno al ardor y al ansia mu…
Es otra señorita de Maupin. Es vi… y frágil como aquella imagen del p… que en la elegancia rítmica de su… nos dibujó la pluma de Theófilo G… Sus rojos labios sáficos, sensitiv…
Yo te he deshecho, ¡oh muerta cabe… para que recatases, destrenzada, el pudor de una virgen desposada que desnuda se vio por vez primera… La ágil caricia de tus sedas era
—¿Eres tú el Justo que a los just… —clamó mi labio, y de dolor maldij… y ante la sorda voz de mi blasfemi… palideció la faz del Crucifijo. Cegó mis ojos un raudal de llanto.…
—Llaman a la puerta, madre. ¿Quié… —Es el viento, hija mía, que gime… —No es el viento, madre. ¿No oyes… —Es el viento que al paso deshoja… —No es viento, madre. ¿No escucha…
Al mirar del paisaje la borrosa tr… y sentir de mi alma la sorda pena… pienso a veces si esta dolorosa am… surge de mí o del seno de la Natur… Contemplando el paisaje lluvioso e…
Si yo fuese un orfebre florentino, sobre el cristal de una esmeralda… con unción religiosa, cincelara la línea audaz de tu perfil latino… Y en el más puro oro, en el más fi…
En las aristas de las altas cumbre… la última brasa de la tarde humea. Un silencio de paz duerme en la al… que eleva entre los huertos sus te… Y al corazón aquieta una saudade
Sacar en hombros por mi puerta miré ayer un ataúd, donde entre flores iba muerta mi Juventud. Perdida toda fuerza física
El alba ciñe las primeras rosas espejo de la mar bruñido, y agranda las pupilas ojerosas la expectación de lo desconocido. El sol disipa el matinal celaje,
Tardes de Paz... Monotonía de lluvia en las vidrieras... Se extingue el humo gris del día..… ¿En dónde están mis primaveras? La lluvia es una fantasía,
No volveré a gozar en tu mirada la luz del Paraíso, ni el fragante reposo de tu seno palpitante servirá a mis cansancios de almoha… que un ángel silencioso, con su es…
Mi vida es el silencio de una espe… Se escapa de mis ojos la mirada, ansiando contemplar la sombra amad… que en otros tiempos a mi lado vie… La mano palpa, cual si presintiera
Por ver quién recogía tu pañuelo, que dejaste caer a unos truhanes, con el más bravo de los capitanes al pie de tus balcones tuve un due… Me hirió su espada bajo el ferreru…