Durante sus pequeñas e infinitas pero acotadas noches de invierno recordó entre sus sueños deltas a sus poderosos progenitores. Su padre, un regular mago bereber, su madre una excelsa p...
Fulgurosa tormenta que de medianoc… Eróticas luces de neón que al danz… Zorros del ártico por la nieve cor… Que se esfuman en su espesar de fe… Silueta de bailarina que sandungue…
¡Porque son los colores de la músi… Que si la labia del folclore y el… al petricor, a resistencia y casta… como la tierra donde nacieron inefable arrebol al margen del río
Tan celestes como el cielo ese faro son tus ojos como el mar son tan profundos con mirarlos me consuelo De tu sonrisa bonita
La esquina en el mar ¿es celeste del cielo o celeste de… En mi silla mecedora donde mi mare… bohemia al llamar, llanto que reba… Tan encantadora que tranquiliza la…
Quisiera poder sentir que la lluvi… que aquellas madrugadas a mis pena… me quedo sin corazón en una noche… se volaron los sentidos sin poderl… me bajaron las persianas las neuro…
Ya estás tú con triangular elegancia cual publicidad de moda en el Manantial de arena a sus hombros la melena.
Mientras Ateles lavaba los platos con mirada perdida y taciturna calma, sin quitarse el moño amarillo de su cuello, escuchaba el manojo de llaves de su compañero de piso, que lo separab...
El cielo de sus ojos se torno plom… de una postal que la saluda El cielo de sus ojos es el milagro del arco iris y mi logro está en su pupila
Te esperé toda la mañana con un ma… te esperé al mediodía con un vino… te esperé toda la tarde con churro… te esperé toda la noche con pizza… Te esperé toda la vida
Y cuando estemos arrebujados entre… nuestros dedos repicando de cosqui… Y cuando estemos jugando como niño… en la plaza de la aureola de rosic… Y cuando estemos de cococho en los…
Se que los extrañare con mucha nostalgia e hidalguía porque a personas tan risueñas nunca fácil se la olvida con tanta emoción los aprecio
Como el volcán que vuelca volúmene… Así es mi amor por ti. Como el tronar de una terrible tor… Así es mi amor por ti. Como del cielo celeste caen los co…
Es que evitarlo no puedo de pensar en el aquí y ahora en los senos de dócil sachet que adornan tu silueta de montaña… con la sencillez del instante más…
Pavel abrió la cajita de madera antes de que el sargento viniese, supo que si lo encontraban con el artefacto rosa y blanco, lleno de estrellitas y corazones en mano iba sufrir horrible...