Todo lo que quiero Es escribir versos sobre tu piel, hacerte un besamanos, Desnudarte de un traje de besos a medida,

Vigilia, no huyas de mí. Quiero amar sin conocer, Un amor de estío en enero, el sueño de una fría y eterna noche de verano,

Con sangre en los pies, Barro en las mejillas, Un hijo en los brazos Y frío hasta en el alma, Said camina.

Ya llegan... Con sus cantos de sirenas, El sable de ruido marchito, Sus marchas militares, Con el odio y el veneno

Para nacer en ti he nacido, Para abrir mis ojos a los tuyos, Y así lanzar mi grito primigenio Asido al cordón de tu mano. Para nacer en ti he nacido,

No desprecies a las hormigas Cuando vueles como un faisán, Y cuando te toque arrastrar Tus huesos por el fango, Recuerda que hasta el gusano

Todo es una ilusión dentro de otra… si no deslizas ante tus ojos el ve… Todos somos uno, y el yo es una le… No. No hay separación entre el mu… la división es un logrado artifici…

Oh, mi dulce bebé robado, Te he buscado toda mi vida Como una perra que rastrea Una lagrima bajo el diluvio, Sin más cuenco que las manos.

Me volví a los bosques del Norte A aullar a la pálida luna, A cazar solo, lo necesario, A limpiar el alma de escombros. Atrás dejé a Tormenta

Vamos con la vida rota, tras una máscara que oculta los golpes del ring. Alguien lo hizo,

Cuando dormías, sin saberlo, con tu peor enemigo, a quien entregaste tu alma, el tiempo, tu energía, tus sueños. Cuando cuidabas a sus hijos

Ahora que no tengo el ímpetu De un bote recién abierto, Que sé arrancarle el sabor A cada escurridizo milímetro, Ahora que cada estación es otoño

Que arda tu monte de Venus, Que se seque a golpe de sed tu fuente de vida. Que se conviertan en desierto Tus fértiles labios

Nos amamos en otro mundo, En el que no hay dolor, Ni hambre, ni problemas, No existe el pasado No hay traumas, ni miedo.

Tengo el corazón de mil años, De piedra, desvencijado, Erosionado por la arena, En ruinas por el uso, malogrado. Los mil inviernos en el alma,