Sólo me importa tu vida. solo me importa el momento, y escuches cuando te diga: Mi vida... ¡Como te quiero...! Nada me importa el dinero,
¡Mírame...! Nos hemos vuelto locos nos hemos dicho tanto tantas promesas de amor ¡Mírame...!
Recuerdo que la tarde de otoño era lluviosa; aparté la vista del libro que estaba leyendo con la intención de encender la luz del cuarto de estar, cuando el timbre en la entrada se dejó...
Hoy he escrito sobre lo que me gustaría llamar “el sueño de un caminante”. Es cierto que no me gusta ser impulsado por el viento durante mi paseo, pero sí es cierto que me gusta caminar...
Soñé como el poeta, que vivía... Pero sentí como su mano fría, mi garganta oprimía. Giré la cabeza... Tú me sonreías
Cuando veas salir el sol en el oca… Y el agua de los ríos subir a la m… Cuando dejes de oír el eco de mi v… ni el rayo prenda llama. Cuando quieras amarme y sea tarde
Bien quisiera huir..., salir de mi cerebro, y nunca más volver a ser esclavo del deseo. Mas...
Hoy leí en grandes carteles que... ¡Nos han prohibido el amor! Y me fui a llorar mi tristeza a un rincón donde nadie me viera. Volví y escribí ¡Te quiero!
¿Por qué será soledad? Que no hay quien te quiera... ¿Qué mal le has hecho a la gente? Que nadie quiere tenerte,
Me quede mirando el cielo... Era una noche obscura..., ¿sabes? Tenía el color de tu mirada. Y me invitó a volar, a buscarte... Mas de pronto, el cielo comenzó a
Desde tu retrato, siento tu mirada… Y las dos se encuentran en la leja… Bajo un cielo raso, donde la añora… toman posesión de la noche..., de… de mi corazón, de mi alma..., de m…
¡Quítate las gafas, niño!... Deja que vea en tus ojos... lo que se esconde en tu alma. ¡Mírame a la cara, niño!... Para que vea en tus ojos
Cerca de donde vivo. En la vaguada. El otoño se muere cada día, en una sinfonía multicolor, de tal belleza...
¡Me dueles cuando te sueño!, robándole suspiros al amor... Con los ojos cerrados y una sonrisa en los labios. Y miro hacia otro sueño,
Palabras de amor. Quiero cantarle a la vida, decirle cuanto te quiero... Y cuando al alba despiertes dejar de oír el silencio.