#EscritoresEspañoles #Generación27 #PoemaDelCampo (1924)
Para picotear sobre mi fría palma bajan aleteando las estrellas y la Osa Mayor no será nunca blan… porque ha olvidado su pasión mimét… Han puesto colgaduras encaladas
En su cuerpo de espuma nacían las… que en ráfagas de viento llenan co… mi corazón perdido en el mar de su… mi corazón hallado en medio del de… por cadenas de voces en oasis de s…
Mi cabeza inclinada sobre el aire miraba su cabeza hecha amor por mi… cuando de sus cabellos saltaban las abejas para dejar su… en los labios resecos y sin espera…
Herido siempre, desangrado a veces y ocultando mi sangre sin riberas llevo mis pasos presos entre niebl… y mis miradas van sobre cipreses. Aún conservo en las uñas esta sang…
Cuerda de guitarra que se rompe al templarla. La punta de la flecha fue untada
El barco es más barco en alta mar, entre las olas y el huracán. Y el águila, en el aire
Y qué se me importa a mí, que la helada se deshiele. Y qué se me importa a mí, que los pájaros no vuelen. Y que los barcos más barcos,
En medio de este hueco redondo y t… que me persigue siempre a través d… retumban los hachazos que separan… brotadas en el tronco de mármol pa… por el humo de pólvora y la luz de…
Este brazo de fuego quemaba mi costado recubierto de brotes plenos de savia verde cuando tu cabellera
Hundido entre juncales, eludí la pasión de la mujer sin carne. Eludí la pasión, dentro de mi ramaje
Porque siempre esté la puerta abie… y sólo esperen ver siluetas. Porque la luz camine desnuda y la vistan de sombras mudas. Porque lleva la mar en su frente
Nuestros cabellos flotan en la cur… y en la curva del agua flota un ba… que lleva en su cubierta entre cer… tus miradas de ámbar y el ámbar de… Nuestros cabellos flotan en aire e…
Bajo una misma luz están nuestras cabezas. Tu corazón y el mío cantan sobre las piedras cuando la noche oculta
Un viento inesperado hizo vibrar l… y nuestros labios eran de cristal… empapados en sangre dejada por los… de las bocas perdidas en medio de… El fuego calcinaba nuestros labios…
El gañán ve encender la candela del cielo, al amanecer. Llega a la besana