Aprende a vivir solo
Aprende a vivir solo.
De lo gregario solo nace la barbarie.
Las masas no piensan, obedecen.
En cuestiones de conciencia
no dependas de nada ni de nadie,
sé fiel a ti mismo.
No busques refugio en ninguna ideología,
no conozco ninguna compatible con la poesía.
No busques consuelos
humanos ni divinos,
pero acoge y agradece
los que vengan a tu encuentro.
Ten pocos amigos, pero buenos.
Entrégale tu poesía
a la mujer que te la inspira,
la única, la tuya,
la que te ha sido dada
como don y compañía.
No tengas ojos solo para lo bello,
atrévete a enfrentarte a lo espantoso
de la vida y a no tenerle miedo.
No te refugies jamás en el “nosotros”,
eso es de cobardes y de necios,
plántale cara a tus actos
y hazle caso a tu conciencia.
No veas en el sexo una necesidad
del cuerpo, sino un milagro del ser
y celebra lo divino del encuentro.
La belleza de lo creado te resultará ajena
hasta que encuentre en ti su nido, te fecunde
y se convierta en aliento de tu aliento.
Libro: Mi cama es una balsa a la deriva
Autor: Juan Julio Alfaya Fernández
Registrado en el Registro de la Propiedad
Intelectual de la Xunta de Galicia.
