#Colombianos #SigloXX
La infancia de Edgar Lee Masters Nunca supo Del galope tendido de los días. Menos aún, del eterno noviazgo Que el tiempo y la muerte
El ángel recorre los rincones de la ciudad con sus alas quebradas y los niños lo apedrean como a un viejo pájaro desplumado. Ni en la iglesia lo reciben sin dejar de hacerle signos de a...
Hago la lista negra de mis dudas e… sé si las cartas que no llegan son… (Al amanecer arrecia la lluvia y a… lejanos...) No sé, exactamente, si algún hombr…
Los cristales se llenan de mujeres… Algunas entran por ellos hacia un… Donde los espejos son de hielo Y las grandes planicies esquimales Están tocadas de silencioso blanco…
Esta mano toma un fruto, La otra lo aleja. Una mano recibe al halcón, se quit… La otra lo ahuyenta, prende una an… Una mano escribe cartas de amor
Tras los temblores y los años que huyen como galgos, la Catedral de Managua se puebla de pájaros. En sus ruinas se siente la presencia del vacío, lejanos murmullos, precesiones de ausen...
A la hora en que el sueño se desli… Como un ladrón por senderos de fie… Los poetas beben aguas rumorosas Mientras hablan de la oscuridad, De la oscura edad que nos circunda…
Voy por la calle con mi maletín de… Y mi billetera de becerro. Calzo zapatos de toro Y llevo un blusón rojo teñido en a… Toda mi ropa fue lavada por un sec…
Imagino una calle. A la realidad le resulta oscura y le agrega un farol. Basta que la realidad meta bazas en el asunto para que el farol reproduzca la sombra de una prostituta. Ya no si...
Con los idiomas que no hablo Babel crecería como nunca. Con las estrellas que desconozco Se podría dibujar un vasto planisf… Con los mares que no he buceado,
Por los caminos ciegos, EL Trasterrado, el sin huellas. En las ciudades de cielos color de vino tinto, El Nocturno con un pájaro de sombra en los espejos. Así cantaba El Trasterrado: “...
Con árboles está levantada nuestra Casa. De casas está forjado todo El barrio. De barrios se configur… La ciudad. De ciudades ebrias se… Un país. De países así se constru…
Como una brumosa Polaroid, La vieja cámara fotográfica Desdibuja el recuerdo de rostros f… No se quejan a la Kodak los fanta… La foto donde una mujer sonríe
El cartero de Van Gogh no visita el vecindario desde que recibió un telegrama de la muerte. Pero nos mira desde una sorda eternidad. El cartero, portador de alguna esquela que le lleva...
Se iba por un sueño. En silencio, descalzos pies, pasos de musgo, recorría parajes blancos cubiertos por el fino talco de los muertos. De regreso del sueño, qué premonitorio el nombre ...