Se impacta la aurora con
el clavel, las pieles del camaleon
ya volaron como una saeta en
el espacio, la escarcha me acompoño
en esta tarde de sonido y silencio,
de ataudes cubiertos por la espuma y el beso.
En esta soledad de las heridas
abiertas hasta las aristas del tiempo
nos olvidan, el emblema del sexo es la
nada y la accion del cafe es la abatida,
con este cuerpo acompañado por la
marcha me despojo de la carne y
el cariño, se me caen las sanjas,
y en la orilla de esta soledad no escampa.