#Cubanos #Mujeres #SigloXIX
Se llena de creyentes el templo so… y a acordes graves del órgano sono… se mezclan en la atmósfera serena… las voces cristalinas que vibran e… Entre las blancas nubes que arroja…
Todo es quietud y paz... En la pe… se respira el olor de los jazmines… y, más allá, sobre el cristal del… se escucha el aleteo de los cisnes que, como grupo de nevadas flores,
Mi único bien sobre la tierra, mi Carlos; acabo de enviar al correo mis cartas de hoy pero a pesar de ser extensas, no te decía en ellas casi nada. Has de saber que estoy hecha una...
Alma y vida mía, mi Carlos, mi amado; Voy a dormirme. Beso con anhelo infinito de besarte, tu retrato que tengo a la cabecera. Como de costumbre abro Gemelas. Hundo la cabeza entre sus ...
Dime á qué flor, Jacinta, le roba… El color de tus labios Y de qué cáliz cándido extrajiste Tu aliento perfumado. ¿Me guardas el secreto porque teme…
No hay en su rostro alburas de frí… ni la pálida lumbre de un disco pu… Difúndense en el nácar de sus meji… los tintes melancólicos del crepús… Ciñen su augusta frente soberbios…
Junto a la negra mole de la murall… que alumbran las estrellas con ten… el trovador insomne de frente pens… preludia conmovido la triste seren… El aura de la noche voluble y fugi…
Marmóreo, altivo, refulgente y bel… corona de su rostro la dulzura, cayendo en torno de su frente pura en ondulados rizos sus cabellos. Al enlazar mis brazos a su cuello
Para que compasiva la recoja, queda mi rima humilde en esta hoja que ensueños melancólicos despiert… brinda calor tu libro a mis difunt… anhelos de pasión, guardando junto…
Su voz debe ser dulce y persuasiva y soñadora y triste su mirada... debe tener la frente pensativa por un halo de ensueños circundada… Su alma genial, cual pálida cautiv…
¿Por qué tan pronto ¡oh mundo! me… Tu veneno amarguísimo y letal...? ¿Por qué de mi niñez el lirio abie… Te gozas en tronchar? ¿Por qué cuando tus galas admiraba…
Quiero morir cuando al nacer la au… su clara lumbre sobre el mundo vie… cuando por vez postrera me despier… la caricia del Sol, abrasadora. Quiero, al finalizar mi última hor…
Hacia el ocaso fúlgido titila el temblador lucero vespertino, y a lo lejos, se escucha del camin… el eco vago de lejana esquila. Como escuadrón de caprichosa fila
Yo he soñado en mis lúgubres noche… en mis noches tristes de penas y l… con un beso de amor imposible sin sed y sin fuego, sin fiebre y… Yo no quiero el deleite que enerva…
Envueltas entre espumas diamantina… que salpican sus cuerpos sonrosado… por los rayos del sol iluminados, surgen del mar en grupo las ondina… Cubriendo sus espaldas peregrinas