#EscritoresCubanos
Déjame reposar en tu regazo El corazón, donde se encuentra imp… El cálido perfume de tu beso Y la presión de tu primer abrazo. Caí del mal en el potente lazo,
Rasgando las neblinas del Inviern… Como velo sutil de níveo encaje, Apareces envuelta en el ropaje Donde fulgura tu verdor eterno. El cielo se colora de azul tierno,
Nací en Cuba. El sendero de la vi… Firme atravieso, con ligero paso. Sin que encorve mi espalda vigoros… La carga abrumadora de los años. Al pasar por las verdes alamedas,
Agoniza la luz. Sobre los verdes Montes alzados entre brumas grises… Parpadea el lucero de la tarde Cual la pupila de doliente virgen En la hora final. El firmamento
Polvo y moscas. Atmósfera plomiza Donde retumba el tabletear del tru… Y, como cisnes entre inmundo cieno… Nubes blancas en cielo de ceniza. El mar sus ondas glaucas paraliza,
Rostro de asceta en que el dolor s… Como el frío en el disco de la Lu… Mirada en que al amor del bien se… La firme voluntad del hombre fuert… Tuvo el alma más triste que la mue…
Noemí, la pálida pecadora De los cabellos color de aurora Y las pupilas de verde mar, Entre cojines de raso lila, Con el espíritu de Dalila,
Frente al balcón de la vidriera ro… Que incendia el Sol de vivos resp… Mientras la brisa de la tarde arro… Sobre el tapiz de pálidos colores, Pistilos de clemátides fragantes
Bate la lluvia la vidriera Y las rejas de los balcones, Donde tupida enredadera Cuelga sus floridos festones. Bajo las hojas de los álamos
¡Quisiera, noble hermana, prender en los encajes del verso y… el alma triste, arcana, sutil y misteriosa que tienen los…
¡Quisiera, noble hermana, prender en los encajes del verso y de la prosa, el alma triste, arcana, sutil y misteriosa
Cuando la ardiente luz de la mañan… Tiñó de rojo el nebuloso cielo, Quiso una alondra detener el vuelo De mi alcoba sombría en la ventana… Pero hallando cerrada la persiana
Tendido en la bañera de alabastro Donde serpea el purpurino rastro De la sangre que corre de sus vena… Yace Petronio, el bardo decadente… Mostrando coronada la ancha frente
En la fuente cristalina De su jardín solitario, Se baña la fiel sultana De hermoso cuerpo rosáceo. Ya no ocultan finas telas
No arrancó la Ambición las quejas… Ni el Orgullo inspiró los anatema… Que atraviesan mis mórbidos poemas Cual aves negras entre espigas blo… Aunque la Dicha terrenal me escon…