Árbol primaveral
Eres un porvenir de sensaciones,
como divina hoja de primavera,
sueñas por el día mientras divagas por la noche, cuanta belleza traes contigo, cuánto morado, cuán grandes son tus valientes alas, diría que eres transparencia impura, locura y cordura, oscura y madura, camino de huida.
Retumbas en mis pensamientos como la música en lo más profundo de mi, vas y vienes en el andar de una vida no merecedora, pero siempre abres nuevos caminos como raíz de árbol, agotada e insatisfecha, lo que mueve tu camino es la pasión que aflora en el campo de flores que llevas de adorno siempre.
Llora, destruyelo, muérdete la lengua, pero te diré que aunque marchites tus flores –la raíz es inmanente en ti–.
si vienes hoy podría abrazarte con mi corazón hueco, te doy espacio a cada parte de tus dolencias, aunque no lo necesites, aunque no quieras venir, aunque no quieras soltarlas, aunque no tengas fuerza, entonces iré a escucharte en el silencio de las palabras que se quedan en la punta de la lengua, y solo quedan miradas y solo queda un leve descanso, ahí quiero estar, M.
