Creo en Ti
Creo en Ti
Creo en las palabras que alivian el dolor,
en los abrazos que calman el temblor,
en las miradas que dicen “te quiero”,
sin pronunciar ni una voz, ni un sendero.
Creo en el “te extraño” que nace sincero,
en desear suerte al desconocido,
en promesas que, aunque sean por mensaje,
llevan verdad como un viejo paisaje.
Creo en la risa que rompe el silencio,
en la música que abraza el recuerdo,
en los momentos que hablan sin voz,
en el amor que se entrega feroz.
Creo en locuras que nacen de un sueño,
en correr juntos bajo el mismo empeño,
en besar paredes que guardan secretos,
en el susurro que escribe un soneto.
Creo en caricias que dibujan caminos,
en el gemido que es eco divino,
en el fuego que enciende la piel,
y en la lluvia que apaga la sed.
Creo en el frío que acerca dos cuerpos,
en el calor que derrite los hierros,
en noches largas de risas y abrazos,
en días breves de eternos pedazos.
Creo en las lágrimas que limpian el alma,
en los aplausos que alivian la calma,
en caminantes que luchan contra el viento,
en marineros que navegan el cuento.
Creo en quien llega y transforma el destino,
en quien escucha con gesto genuino,
en quien ilumina con solo escuchar,
en quien te hace volver a empezar.
Por todo esto, mi vida, hoy confieso
que en ti encuentro mi sueño más fresco.
Tus gestos, tus risas, tu luz sin igual...
¡Amor, con solo existir, me robaste el alma al pasar!
—Luis Barreda/LAB
