Muerde el polvo tu avaricia sin saber que te espera la muerte en la vereda. Saben a hiel tus caricias templadas a su hedor frío.
Carne y sangre nos unen, imperan lazos que nutren, fuiste vida en mi ser, eres ser de mi vida. Luz que me indica el camino,
Y las nubes tapizan el cielo cubriendo tu dolor el alma empequeñecida produce sinsabor tu aciaga mirada
No es tu mirada la de siempre, no brilla en la sombra de la noche… tu sonrisa delata ¿Dolor? ¡No! Sólo necedad,
Sonidos mudos para la escucha Irremediable búsqueda del ser Lentitud acomodada del pensamiento Entendimiento crucial para el alma Negligencia aparcada en la cuneta
Una sonrisa tuya, un arcoíris surg… el horizonte cercano, la mano alca… tus ojos brillan, armonía en tu vi… tu corazón late contra viento y ma… La siega en el monte, la pesca en…
Las luces se derraman sobre el vid… pinceles líquidos de púrpura y fue… se deslizan como dedos en mi espal… El horizonte se abre, tibio y palpitante,
Encriptados en las minúsculas partículas del aire se encuentran descifrados los sueños que pueblan mis mundos de átomos y elementos.
!!NO¡¡No, nada es la palabra que mi mente rebusca que mi cerebro clickea que mi mano reescribe. No, nada es la palabra
Farolillos encendidos junto a tu r… geranios en tu ventana gotas de agua resbalan en las sombras de tu cuarto se cob… espera mientras te admira
Una sonrisa cultiva tu rostro encanecido, se amoldan los años a tu cintura, tus manos sellan
Música que deleita los sentidos marcas el ritmo del deseo sin miedo, ese tango que te embauc… sinprisa, con pausas que acerca a tus sentidos
Purpuras, brillantes estrellas juguetean en el cielo removiendo aquel tiempo pasado, presente, futuro. Una joven luna
Un, dos, tres, contaba Luisillo arrimado a la par… Cuatro, cinco, seis, se rasca, le pica la piel del pie. Siete, ocho, nueve, diez,
Eres siervo de mi ser acólito de mi pensamiento esclavo de mis sentimientos desdibujas las fronteras donde mi yo se estremece
