No se apresure, no se apasione. La fortuna bendice a quien sabe esperar.
Mar chileno amigo de la cordillera, cuyas aguas bajan en verdes venas hasta mezclarse
Fuente de hermosas aguas y verdes juncos... ¡¡Heme aquí!!
En la ciudad ni rumor de las doncellas se escuchara antes de las siete lunas.
Soy amiga de la vida revolotean burbujas de jabón y mágicas mariposas por mi avenida.
La prisa puede conducir a error es propio de sabios ir a pie, paso a paso,
Marineros de Chile ¡¡Rudos!! como las rocas del mar y ágiles como el ir y venir de las olas.
Extraíste lo dulce de tu pócima has ordeñado la vaca de pesares y ahora disfrutas la mielosa leche láctea de las ubres de oro.
El sol doraba las altas cimas. Mientras mi corazón se revoluciona… en tumultuosa esperanza.
¡¡Que hablar contigo, sea provechoso!!
Si deseas cambiar... ¡¡Deja de hacer lo mismo!!.
La comitiva de mujeres danzaban y reían al tañir los tambores y un ala de oro se despegaba del sol.
He adornado un pequeño altar. Allí arden viejas hojas de laurel aromatizando el ambiente
Color de sol color de luna color de espuma color de miel color del tiempo.
La estrella de duro diamante duerme sobre la pizarra negra del firmamento.