Cargando...

Escalera

Me quedé esperándote
no sé cuántas noches,
mientras tu reías
pasando las lunas.
Te esperé sentada
en las escaleras,
con mi falda negra
con mis medias bucaneras
con el corazón en la mano,
apretándolo de vez en cuando
para desestresarme
o para obligarlo a bombear sangre.
Te esperaba mirando
desde la terraza,
rogando que aparecieras detrás de mí
pero lo único que sentía era el frío
de la ausencia que siempre estuvo.
Te esperaba
pero esperaba
algo que no era para mí.
(Ahora no sé qué esperar).
Otras obras de Paola Granville...



Top