#EscritoresColombianos
Otra vez ha llegado el arrogante a… y se ha instalado aquí donde tu nombre comienza a ser un… que me da sombra con sus siete let… sin permiso sin prisa –con un rost…
La noche, oscura loba, golpea las… con una lluvia airada. A lo lejos un monótono ruido de motores recuerda la ciudad que se desvela.
Por el camino de tu lengua yo podr… hasta la negra Abisinia o cabalgar hasta Bengala o Nankin porque ella es sabia como un viejo… enseña sobre el cielo
Escucha, amor, ¡viene la muerte avisando! Oye entre las duras piedras su rumor. Viene la muerte al galope
Duélete: como a una vieja estrella fatigada te ha dejado la luz. Y la criatura que iluminabas (y que iluminaba
Nunca fue tan hermosa la mentira como en tu boca, en medio de pequeñas verdades banales que eran todo tu mundo que yo amaba,
Ese sonar de aldabas me levantó de… sobresaltó mi corazón dormido. Cuánto ruido trajiste a esta casa: Qué músicas extrañas, qué silencios no oídos.
Como un depredador entraste en cas… rompiste los cristales, a piedra destruiste los espejos, pisaste el fuego que yo había ence… Y sin embargo, el fuego sigue ardi…
Tu boca viene a mí, solo tu boca. Viene volando, libélula de sangre, llamarada que enciende ésta mi noche de ceni… Toda la sal del mar habita en ella…
Hay penas que terminan avergonzándonos: zonza, desprestigiada, monocorde como el zumbido del moscardón contra el cristal o…
Hoy vi que a ese lugar donde te am… —y donde fue temblor nuestro silen… cuando anunció con voz eterna la a… que ya se alzaba el día— llegaban implacables los hombres c…
Dice Claudia que las tardes sombr… nos tranquilizan. Todo en ellas es… para el desasosiego entre sus fald… Es cierto, Claudia. En las tardes nubladas la vida pas…
Para tus ojos quisiera yo beber el dulce azogue, y amanecer cubierta de polvo de me… como una joven faraona muerta. Robarles su color a los almendros,
Ahora que ya remonto la mitad del… yo que siempre me apené de las gen… yo, que soy eterna pues he muerto… y que alargo mis brazos al sol en… en las noches y me canto canciones…
Porque ahora paso mi mano sobe el… y si cierro los ojos oigo correr u… porque mi cuerpo comienza ahora en… donde alcanzan tus brazos y el mie… y sé llamar las cosas