La casa, en una lometa propicia para admirar, me convida a ver el mar que es pintor y que es poeta. A mis pies se parapeta_

Cuando, en las horas cálidas de la… en tus mejillas róseas se enciende… tu carne nacarina con eretismo que… tu cuerpo es una llama que tiembla… Hay fuertes contracciones en lo ho…

Cielo azul, verdes manglares, calvas colinas; y el río que al pasar junto al bohío aquieta sus alamares. Garzas de leves andares,

Tuvo el Emperador romano alguna aberración senil consoladora sueños como cambiantes de la luna, ansias como celajes de la aurora. Tuvo el Emperador nefasto y grave

Hay más arcano que en el beso, que en el dolor y que en la muerte… en el ojo humano del elefante. Y mientras danza torpemente y sincroniza sus orejas,

La marea baja descubre _como una pradera sepia comida de cardeni– llo_ la atormentada cacharrería y… exóticos retales que el mar _el bu… chamarilero_ guarda con avaricia e…

Hominicaco, no seas curioso. Deja en paz las estrellas; haz un mondadientes con tu telesco… ¿De qué te serviría descubrir el m… de los mundos si has _siempre_ de…

Mientras que en silencio con ardor… y entornando los ojos de placer so… mentalmente de todos tus espamos g… bajo la borrachera de mis melancol… Te hablé de los misterios sensuale…

Recorren la Horas con rítmico pas… y trozan los robles proceros con h… Es su ronda constante y profícua:… Los robles más viejos no encaran s… trabazón de las ramas se aclara a…