Mi hija (año y medio) procuramos q… en los momentos buenos o mejores: cuando nos abrazamos y besamos, cuando las cosas discurren con lis… cuando no hay gritos ni vajilla am…

Siéntate a la mesa. Bebe un vaso de agua. Saborea cada trago.

Camino por el tejado del centro comercial. Lo tienen montado como un jardín. Plantas por aquí y por allá. Flores, enredaderas, incluso

Otra maldita tarde de domingo, una de esas tardes que algún día escogeré para colgarme del último clavo ardiendo

Me hablaba del cielo de Esmirna, de las doradas cúpulas que alumbra la tarde veneciana, del aire perfumado y cómplice de c…

Nadie que habiendo estado, pongamos por caso, paseando al perro por una calle céntrica y desierta a las tres o tal vez a las

El humo cuelga en la estancia como un chiste malo. Lou Reed habla de familias rotas desde los altavoces:

Gente. Pedazos de carne con patas. Dos cosas que se llaman ojos.

Las 00.30 y heme aquí fumando hasta matarme delante de una pantalla negra con manchas de verde embadurnándola.

Suena el teléfono. Manolo. Me com… que le han dejado un ojo como un p… En una fiesta —cosas que ocurren,… cuando uno se divierte. Algo que, como ya se sabe, no gusta dem…

Es inútil, le dije. Escribir. Escribir es inútil. Ya, me contestó. Ya lo estaba yo pensando

Te dirán que vales lo que eres y no lo que tienes. Y tendrán

Tú sí tú no tú sí tú no tú sí

Hace falta estar a punto de morirse para caer en la cuenta de que nada en esta vida

Desayunar con Nietzsche es relativamente fácil, sobre todo si hace sol, la lluvia es fina —un ligero chaparrón traslúcido y oxigenado–