De «De un marzo los días todos»
usted no necesita presentación aunque no le sobre, don nica y perdone que lo llame así pero es así como usted se llama como sea, y aunque fuera mejor que…
Hubo un tiempo en que los hombres fueron dioses y dominaron todas las artes y las ciencias de forma misteriosa e inmisericord…
El día de la madre, de mi madre, e… Ella me enseñó a ser lector, y a r…
Desperté con la mitad de los ojos.…
no me tiren tanta pregunta
Ser poeta en esta época (en esta vida, en esta era) no tiene mérito alguno (cualquiera podría, a muchos les t… ni don ni gracia
Más que temerle a qué dirán le temo al qué diré.
señoras y señores niñas y niños personas y personos quedan cordialmente invitados a to… y siempre para que crezcan grandes…
Cuando quiero conocer a alguien me busco en Google. Aparecen personas que me reconocen… y otras que huyen de mis ojos inqu… a veces soy perseguido y otras per…
La veo acercarse, por mí. Sin traje de gala arrima, sin armas. De albo fulgoroso viste sus negras empresas. La veo cada noche, en mi cama,
¡este es un excelente poema! ¡el mejor poema de todos los tiemp… ¡el único poema de la historia! pero usted no lo está leyendo, lás… ni mucho menos preguntándose si es…
una buena palabra por verso
—¿Me enseñas a escribir poesía? —Eso no se enseña. —¡Enséñame! —No la escribas. —Gracias.
No tengo dónde anidar el mundo es cada vez más plano.
Una bestia de siete cabezas me habita y, como es natural, cada cabeza tiene su propia dieta. La que más vigilo