De «De un marzo los días todos»
¡este es un excelente poema! ¡el mejor poema de todos los tiemp… ¡el único poema de la historia! pero usted no lo está leyendo, lás… ni mucho menos preguntándose si es…
Colores blandiendo la espada de la… Convites acuosos desde el fervor i… Visitas empíricas e inusitadas par… Cubrimiento de primer nivel de las… Insectos demorados en la barra del…
Mañana será otro día, le dije a la poesía mientras se en… al riguroso placer de volver a cas… Mañana será el mismo día, dije cuando ya no me escuchaba.
seguir reglas pero si están
con la mano izquierda escribamos a… en honor a los zurdos, en contra d… o usemos hoy nada más que el lado… imaginemos con el zurdo músculo in… no perdamos la ocasión, seamos zur…
Una bestia de siete cabezas me habita y, como es natural, cada cabeza tiene su propia dieta. La que más vigilo
—¿Cómo se llama esto? —Mar. —¿Y para qué sirve? —Para irse.
No me consta que me conste lo que… Ni me consta que no me consta lo q…
El polvo carcome las que fueron nu… las abraza, las babea, les sorbe l… Polvo vampiro, te veo en el aura n… veo como alzas el vuelo blando, de… sin penitencia, saciado, riendo ra…
Para qué un poema extenso si la vida dura un verso.
No importa quiénes sean los comensales al otro lado del libro. La poesía no sabe dar de comer.
Tibio lecho, de dispares usos, cuéntale, al oído, de tus amantes anteriores, de los que, como él, dejaron sus sudares en tus tejidos… y partieron, a otro camastro,
Todo verso nace porque sí. De sí.
de mí cuelga una gota
sin pena ni gloria lo digo necesito de su ayuda para terminar… gracias por su ayuda