Ojalá, León, seas campo alegre mayor; en la ciudad opaca, equidistante, no eres puente de amor. Ojalá, León, seas
Niña en el tropiezo te cruzaste con la comba caíste en el enredo encerrada en su mazmorra Apretada en tu cuello
Si, soy yo, los ojos de la misantr… Oscuridad pestilente de lágrimas durmientes que ensombrecen la anarquía. Si soy yo, caballero de la muerte,
Irina, si mis ojos sueñan, Irina a mis sentidos frena. Risueña su risiña quema Y calma la ira de mis venas Irina, con su piel de cobre
Cinco gatos en una bolsa, cinco en la losa, cinco en la fosa. En el agua cinco, sin el aire cinco.
En la expresión del espejo observo la frialdad de esa sonrisa como una caries que se expande en los llantos, sin empeño. A esta crisis que me rompe
Estoy ciego, con los ojos arrancados por la crueldad del sin vivir. Oigo mi sollozo en otras manos. Me persigue ese ruido,
En la ira de tus besos, me siento vivo, extasiado, porque en ti hallo el regocijo que me aclama
En su elegancia me perdí por su carisma me detuve soportaron mi desliz las emociones que contuve. Me perdí
Adiós, mi viejo amigo, ahora que te has ido vida nace en un pardal. No es una coincidencia, que de todas aparezca
Concédeme esta tentación, la ocasión de tumbarme en las ramas de tu cama. Te muestras, mujer fatal,
El tallo del lirio marchito respira sobre hojas caducas mecidas por viento supino olvidan las ríadas que surcan. La planta ardiendo se enceniza
Cuando la guerra estalle Y la tierra colapse Caerán bombas en tu casa. Acuérdate entonces de tu nación Tras las putas fronteras
Si la vida un juego fuese nos atraparían sus azares seríamos dados pares hasta que uno pereciese. Si la vida un juego fuese
Cualquiera sea la herida en ti la besaré. Tu dolo desharé con mis lágrimas vertidas. Cualquiera sea, cualquiera,